Carta de un ex-activista Humanista a Pepe Rodríguez

Pepe Rodríguez, Doctor por la Universidad de Barcelona (Facultad de Psicología), está considerado como uno de los mejores expertos en problemática sectaria y sus libros y artículos sobre sectas, adicciones, crítica de la religión o desarrollo de los mitos, entre otros, son una referencia obligada para todos los interesados en estas cuestiones.

Hola señor Pepe Rodríguez, me llamo Tomás Aranda Castro y pertenecí a La Comunidad, Movimiento Humanista y Partido Humanista. Digo pertenecí porque desde hace 20 años ya no pertenezco (empleo la palabra pertenecer como si hubiese pertenecido a cualquier institución "aceptable" por usted). Hace 20 años!, recuerda que hacía usted entonces?, escribir seguro, pues ha debido ser su mayor fuente de ingresos. Ya habrá entendido, según su criterio, que fui un "adepto a las ideas siloístas", y supe de usted porque así me enteré yo que "había sido captado por una secta de las llamadas destructivas" (sus apariciones en televisión dando cuenta de ello y de otro de sus libros que salían a la venta).

Me fui cuando quise, estuve cuanto quise, las últimas veces que he hablado con personas que siguen ahí (activistas siloístas) han sido porque yo he llamado y que querido saber algo de ellos, en todo este tiempo desde que me fui (20 años), no recibí ningún tipo de presión, chantaje y/o amenaza por parte de nadie, cosa contraria de lo que usted cuenta en sus libros.

Me sorprende que usted que se considera periodista de investigación, y goza de tanto prestigio en el campo de las sectas, jamás hubiese hecho ningún tipo de acercamiento hacia los humanistas (que tengo entendido se lo ofrecieron), y no se cómo investigó y concluyó que se trataba de una secta destructiva, no creo que un prestigioso periodista de investigación se hubiese basado únicamente en testimonios de algunas personas que estuvieron. En toda organización, grupo, etc. siempre hay gente que se va con más o menos desavenencias y no por eso y desde ahí se puede concluir nada serio, eso solo lo hacen las vecinas de barrio. Me considero una persona con sus errores (como cualquiera) y siempre pretendo aprender de ellos para ser mejor persona ante mi conciencia, así que no puedo estar de acuerdo con nada ni con nadie que pretenda una acción social y se beneficie de ella, como es su caso, no?, y en eso tendré siempre especial cuidado de no caer (ni para beneficiarme a mí ni a nadie), porque nadie puede beneficiarse diciendo que contribuye a la verdad, a la justicia, a la libertad, etc. en pos de un mundo mejor (mírese políticos y demás).

Tal vez el hecho de que yo piense así, haciendo ya 20 años que solo me dedico a mi vida personal, a usted le pueda hacer peligrar su sistema de creencias y opte inmediatamente por buscarme una etiqueta que le facilite a usted de nuevo la acomodación de su estructura mental, tranquilidad de conciencia y justificación de ingresos. Ahí yo no puedo hacer nada, el autoengaño es una especie de libertad personal, pero si por lo menos le creo dudas, actúe pues en consecuencia, hágalo por las influencias erróneas que ha podido y pudiera ejercer en las vidas de personas y por los beneficios que de ello ha obtenido (prestigio y dinero).

Sin más, agradezco su atención (en el caso de prestarla):

Tomás Aranda Castro

                     Licenciado en E.G.B.

                    Está considerado un rebelde

                    crítico del sistema

                    No es referencia para nadie